Es algo preocupante. Nuestros niños desde muy temprana edad ya están expuestos a escenas de violencia innecesarias para su edad. Y esto es algo que ha ido creciendo en el tiempo.
Así lo demuestra un estudio que presenta el sitio español ABC y que fue publicado en Pediatrics, que obtiene como conclusión que esta violencia se ha triplicado en los últimos años. Esta tendencia que se está dando, causa mucha preocupación en los expertos, puesto que muchas otras investigaciones realizadas con anterioridad demuestran que la presencia de imágenes o armas incrementa la agresividad en las personas.
La investigación analizó películas para menores de 13 años desde el año 1985 en adelante. Se tomó ese año ya que es ahí donde se comienza con la calificación de edad en Estados Unidos y entrega una referencia clara hacia quién va dirigida la película.
El estudio ha desvelado que, entre 2011 y 2012, las películas estrenadas para menores contenían muchas más escenas con armas de fuego que las destinadas a los adultos.
Dentro del estudio, se midieron las diferencias con escenas que tuvieran imágenes de armas de algún tipo dentro de ellas. Las películas para menores de 13 años apenas contenían escenas de armas o violencia en el año 1985. A partir de ese año la frecuencia de estas imágenes no ha dejado de ir creciendo y desde el año 2005 se ha acelerado aún más.