“Tu padre se molesta por tus travesuras, tu abuelo las disfruta”.
No hay nada más cierto que “los padres están para criar y los abuelos para malcriar”. Muchos abuelos asumen que su etapa de crianza ya está lista con sus hijos y llegó el momento de disfrutar a los niños.
Muchas veces no estamos de acuerdo con lo que dicen o hacen, pero vemos como nuestros niños disfrutan estar con ellos y entre ambos se forman lazos de amor infinitos, que finalmente cedemos ante su forma de hacer las cosas.
¿Cómo podemos notar esa diferencia entre la crianza de los padres y la diversión cariñosa de los abuelos? Mira estas frases y reacciones ante diferentes situaciones.
1. Nutrición
Los padres: “No, no puedes comer postre hasta que te comas tu brócoli”.
La abuela: “Estoy de acuerdo, el brócoli es lo peor. Toma, come una galleta”.
2. Salir con chicos y chicas
Los padres: “¿De qué tipo de familia viene?”
La abuela: “Todas las chicas salen con un chico malo al menos una vez. Pregúntale a tu mamá sobre ese novio que tuvo antes de conocer a tu papá”.
3. Planear los gastos
Los padres: “Si quieres un par de zapatillas neón de $120 dólares guarda la mitad de tu mesada durante tres meses y pagaremos la diferencia”.
La abuela: “¿Qué talla eres? Ahí están“.
4. Perseverancia
Los padres: “No, no puedes abandonar tus clases de piano. Ya pagamos todo el año y te comprometiste”.
La abuela: “Lo intentaste y no te gustó. En fin. Probemos algo nuevo”.
5. Proyectos manuales
Los padres: “Si quieres disfrazarte de hada para Halloween miremos qué tenemos en casa que nos sirva para hacer las alas”.
La abuela: “Hay una tienda de disfraces increíble en el centro. Si llegamos temprano podremos conseguir ese lindo traje de hada madrina antes de las otras chicas lleguen”.
6. Obediencia
Los padres: “Nos desobedeciste. Estamos molestos y muy decepcionados.”
La abuela: “No me importa lo que hiciste. La abuela piensa que eres perfecto.”
Finalmente es así como los abuelos se dan cuenta de que envejecer no es tan malo como pensaban. Tienen nietos para amar y cuidar sin tantas preocupaciones como cuando eran padres. Y, lo mejor de todo, es que saben que su actitud contigo te ayudará a convertirte en una gran persona algún día.
Así que la invitación es a dejarlos disfrutar ser abuelos y nietos…¡es lo mejor del mundo!
