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Las Cenizas del Juramento, una saga épica

Pareciera ser mucho más grande de sus 28 años. Así es Exequiel Mongue, pero que comenzarás a conocer como Joseph Michael Brennan, escritor que nos trae el libro “Las Cenizas del Juramente” el primero de una saga juvenil de fantasía medieval épica que nos habla sobre el descubrirse a uno mismo para poder forjar tu destino.

Bueno, siento una tremenda fascinación por ese mundo y apenas vi el libro dije: yo tengo que conversar con el autor. Y dicho y hecho, acá les dejo la entrevista a Michael Joseph Brennam, y muy invitadas a comprar y leer su libro.

¿Quién es Joseph Michael Brennam?

Yo soy chileno, nací en Santiago en 1987 viví acá toda mi vida hasta los 25 años que me fui a vivir a Irlanda, que es donde vivo por ahora porque estoy estudiando un doctorado. Digo por ahora, porque mi intención es volver a vivir a Chile cuanto antes. Me gusta mucho vivir en Irlanda y en Europa, pero soy un árbol con buenas raíces y no me gusta la idea de vivir a un océano de distancia de mi mamá, de mis grandes amigos, de toda la gente que quiero.

Dentro de todo este estudio, porque un Doctorado no es menor, ¿Cómo nace la idea de escribir un libro?

Para mi escribir es la cosa más natural del mundo. Mi mamá de chico era muy de la línea de leerme, de contar historias. No inventadas por ella, sino que leídas y muy bien leídas. Y mi papá también. En general me contaban buenos cuentos. Recuerdo que mi papá tenía un libro de los Hermanos Grimm y me lo leía donde estuviéramos y a cada momento. También me contaban mucho sobre cuentos de hadas, mitología y mucho más. Particularmente, yo tengo muy buena memoria y mi papá me interrogaba de lo que me leía y yo nunca equivoqué en contestar. Después, mi mamá me leyó El Hobbit a los siete años (versión comic) y de ahí para adelante no paré nunca más de leer fantasía.

Me encantaban los cuentos y yo quería escribir los míos. Jugaba con mis juguetes y creaba historias y después las dibujaba y mi mamá me escribía el texto y mi papá me corregía los dibujos (él era un ilustrador (arquitecto) maravilloso). Entonces con todo esto, escribir se transformó en parte de mi vida de manera natural. Mi primera novela la escribí a los 15 años con la que gané un concurso literario en el colegio. De ahí seguí escribiendo. Empecé una novela histórica de Japón pero, como estudié historia, me obsesioné con la exactitud y nunca la termine.

De ahí dejé de escribir por harto tiempo, pero sentí la necesidad de volver a hacerlo. Me gustan mucho los juegos de rol y a través de eso creaba muchas historias de fantasía. Fue ahí cuando empecé a escribir “Las Cenizas del Juramento”.

¿Qué influencia tiene haber leído El Hobbit cuando chico (y Tolkein) en tu forma de escribir, en las historias que vas creando?

Yo crecí en una época donde las películas de Tolkein no existían, entonces su narrativa le da una propia forma a la mente. Cuando uno lo conoce y se familiariza con él desde tan chico, todo cobra sentido: desde el paisaje, la calidad de los personajes, los diálogos, etc. Tolkein  Establece una barra en torno a la calidad de las historias que uno quiere que le cuenten. No solo desde el punto de vista de la calidad artística, sino que también desde la calidad humana. Con Tolkein, que fue una confirmación de lo que me pasó a mi leyéndolo y que ya venía desde los cuentos de hadas que escuchaba cuando chico, te introduce en un mundo de “epicidad”; en el mundo de lo épico, que es un mundo de belleza, de esperanza, de verdad, es un mundo de grandeza de ideales, de altura espiritual. Y eso determina tu forma de lo que quieres ser cuando lo escuchas desde niño. Algo así como un caballero como Aragorn (no es mi caso porque yo quería ser Gandalf) que produce cierta cosa que te marca a todo nivel. De hecho me especialice en arte medieval y mi doctorado es en estudios célticos. Me marco para siempre y Tolkein es único en eso.

¿Sientes que tus papás te apoyaron en esta idea de ser escritor? ¿Qué tan importante fueron ellos?

Mi madre siempre me ha apoyado en todo lo que he querido hacer, siempre ha tenido la certeza de que voy “a caer parado”. Ella se ha ido adaptando a la imagen que yo mismo me he hecho del futuro. Lo que sea que he querido hacer, ella confía plenamente en que lo haré bien.

Mi papá en cambio para él fue una decepción fue que estudiara Historia y no que hiciera literatura desde un comienzo. Por él que solo me hubiera dedicado a escribir. Le gustaban mucho mis escritos, alcanzó a leer “Las Cenizas del Juramente” antes de morir y le encantó. Cuando le conté de mi obra, de que me habían contratado en Penguin Random House fue uno de los grandes orgullos que tuvo, para él fue muy importante.

Hablando ahora de tu libro ¿Qué pueden encontrar los lectores en “Las Cenizas del Juramento?

Las Cenizas del Juramento es un libro que enmarcándose en el género de la fantasía, tiene cosas especiales. Voy a empezar por lo más adjetivo hacia lo sustancial.

Por una parte es un mundo que tiene novedades. Yo lo hice, yo lo armé y lo sigo armando porque El Sur y otros lugares de mi imaginación siempre están en proceso de construcción. Es una colección de paisajes hermosos y yo creo que el lector se va a encontrar es con mucha belleza de lugares. Se van a encontrar con un viaje, con personajes que están construidos como seres humanos, que tratan de ser bien poco caricaturizados, que tienen heridas, preocupaciones, que tienen fallas, defectos y también grandes virtudes. Sobre todo, son personajes que valientes, que están orientados a ser algo grande en su vida, están llamados a cumplir con un destino hermoso. Épico.

Las Cenizas del Juramento, a diferencia de lo que viene más adelante con los otros libros, es la historia de un joven (Tahmuz) que a través de un viaje lo que le toca es descubrirse a sí mismo, como origen y sentido, a través de una cosa fundamentales: la amistad a través del descubrimiento de relaciones significativas y grandes afectos humanos. Esto lo vivirá con Tarian (su amigo de su misma edad) y con Doenal (su protector, su maestro en muchos sentidos). Y a través de este viaje se tiene que enfrentar al sacrificio de sí mismo, a pasar penurias, a esforzarse, a sufrir, a adaptarse y asumir las dificultades de este viaje para que de esta manera con sus amigos va saliendo a la luz qué es y que quiere hacer con su vida.

Me parece que es un libro escrito (geek de Star Wars, de juegos de rol, de las películas de Superhéroes) a mi gusto y creo que tengo un gusto común con mis lectores. A mí me habría encantado leerlo escrito por otra persona y creo que les va  a gustar. Es un libro para chicos de 14,15 18, 20 años y para todo el mundo pero que de alguna manera esté conectado con el mundo de la épica, de la fantasía que pareciera que está solo destinado para la juventud. De chico puedes tener grandes ideales, pero a medida que creces tienes que “madurar” y dejar tu parte más épica y soñadora atrás.

Es un libro feliz de leer.

¿Ya estás trabajando en lo que viene?

Sí, ya estoy escribiendo lo que viene y debería estar listo en los próximos meses. Estoy dándome más tiempo para escribir literatura (es verano en Irlanda) y tengo un descanso de mi tesis de doctorado.

Para terminar te quería hacer una pregunta más personal ¿Por qué utilizar un seudónimo?

La razón es porque quería diferenciar mi vida académica de mi faceta de escritor. Me pareció inteligente separar las cosas y utilizar nombres distintos para cada actividad. Para que el día de mañana quede claramente diferenciada mi escritura literaria de mi producción académica.

¿Por qué Michael Joseph Brennam específicamente?

Básicamente porque quería un nombre irlandés ya que llevo muchos años estudiando la cultura irlandés y llevo tres años viviendo allá. Así que quedó así: Joseph (por San José, santo del que soy devoto); Michael (por San Miguel Aracangel); Brennam (Porque es un apellido irlandés que me gustó). Bueno, luego de la muerte de mi papá, que se llamaba Miguel, finalmente el tener a Michael ahí es una bonita coincidencia y cada vez que lo veo, pienso en él.

Las cenizas del juramento portada

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