Según un estudio realizado en la Universidad de John Hopkins, en Baltimore, la alteración química de los genes, que es detectable mediante un simple análisis de sangre durante el embarazo, pronostica en un 85% de acierto si la mujer podría llegar a desarrollar la depresión post parto.
Los científicos indicaron que las modificaciones, que alteran la manera en que los genes funcionan sin cambios en la secuencia del ácido desoxirribonucleico, pueden detectarse en la sangre de las mujeres embarazadas en cualquier trimestre de su embarazo.
Es precisamente ese cambio el que puede ayudar a detectar si semanas después del parto se puede llegar a tener esta depresión. Y además, aseguran que esta investigación entrega la posibilidad de intervenir terapéuticamente en los casos necesarios y así impedir que los síntomas se tornen cada vez más graves.
El estudio realizado da un primer acercamiento al tema y fue realizado a 52 mujeres embarazas, pero para verificar los resultados, se requerirá de pruebas con mayor contingente.
Aún no está claro que causa la depresión post parto. Algunos científicos lo vinculan con la caída de los niveles de estrógenos en la mamá después del parto, pero algunos estudios demuestran que esta teoría no sería acertada, puesto que las que tienen depresión y las que no, muestran niveles similares.
La depresión post parto incluye sentimientos de tristeza, desesperanza, cansancio, ansiedad y se puede comenzar a manifestar desde cuatro semanas después del parto y puede prolongarse por semanas, meses y hasta un año.
Ojalá que estos estudios sigan avanzando y así le permitan a todas las mujeres disfrutar el nacimiento y crianza de los primeros meses de sus hijos, etapa en la que es fundamental el amor, el cariño y los cuidados de la mamá.