Están siempre ahí, pero no les damos importancia. Usamos el que mejor combina con nuestra ropa, lo que no siempre coincide con el que está en mejor estado. Nuestro sostén cumple un rol importantísimo en nuestro cuerpo por lo que es importante que tengas en cuenta que tu cuerpo está cambiando constantemente, y que no debes dejar que esta prenda llegue a su peor estado para pensar en cambiarlo.
¿Sabías que la vida de un sostén es de 6 a 12 meses? Y ojo, este dato no lo dio ninguna marca que se encarga de venderlos, lo revelan estudios que determinan que es su tiempo de vida “realmente” útil.
El soporte de un sostén es importante para tu busto, y utilizar un modelo que ya no te ofrece el soporte adecuado, puede traducirse en terribles dolores de espalda y senos caídas, entre otras cosas.
¿Qué debemos tener en cuenta?
– Si aumentas considerablemente de peso (más de 5 kilos), es probable que tengas que cambiar el sostén inmediatamente.
– Es importante que no te quede ni muy ajustado ni sueltoo, por lo que SIEMPRE debes medírtelo en la tienda… Nada de verlo por encima y decir: “Yo creo que este es mi talla”.
– Si notas que los tirantes ya está desgastada, también es momento de botar ese sostén. Si bien es cierto que el soporte más importante lo brinda la copa, las tiras ayudan en esa labor.
– Por otra parte, si notas que la orma (aro de metal que rodea la copa) ya perdió su forma, olvídate de él.
– Si la tela con la que está elaborado está sumamente desgastada, es hora de que vayas a por uno nuevo, porque esta es una clara señal de que está muy usado.
